15 de abril: la Patria resiste a pie firme el ataque

Cuando fueron entrevistados por la prensa aquellos pilotos estadounidenses que bombardearon los aeropuertos cubanos el 15 de abril de 1961, su testimonio reveló que poco antes de producirse el ataque, uno de los “consejeros” yanquis les había asegurado: “Ustedes no tienen por qué preocuparse de los aviones caza de Castro, porque ellos no estarán en el aire. El aire será nuestro”.
Era esa, en efecto, la concepción elaborada por el Pentágono y la Agencia Central de Inteligencia de los Estados Unidos (CIA). Aspiraban a destruir en sus bases a los pocos y maltrechos aparatos de la Fuerza Aérea cubana y conseguir con ello, a la vez que una impunidad absoluta para sus fechorías en el aire, la preservación de la brigada invasora contra toda posible acción de nuestros aviones de combate.
Aplicaron el esquema ya estudiado: un ataque previo desde el aire, destrucción de los aviones en tierra, provocar desmoralización, pánico, y luego, como paso decisivo, el desembarco mercenario. Ese día 15 de abril, desde el amanecer, fueron bombardeados de manera simultánea los aeropuertos de Ciudad Libertad y San Antonio de los Baños en La Habana, y el aeropuerto Antonio Maceo de Santiago de Cuba. Era el primer capítulo de la invasión y también fue su primera derrota.
Los aviones cubanos, remendados y viejos, habían sido dispersados y protegidos. No pudieron ser destruidos, y se preservó así la fuerza que, pocas horas después, para asombro y terror de los invasores, escribió páginas incomparables de heroísmo en el cielo de Playa Girón.
El pueblo, al que pretendieron amedrentar con el ataque sorpresivo y cobarde en esa fecha, respondió entero a la orden de combate de la Revolución. Centenares de miles de hombres y mujeres partieron hacia sus puestos. Ese espíritu y esa actitud las resumió en un solo gesto el joven cienfueguero Eduardo García Delgado, de apenas 25 años, quien fue alcanzado por las balas, pero antes de morir todavía le quedaron fuerzas para levantar la mano y con su sangre escribir un nombre: Fidel.
Como señalara el Comandante en Jefe en un comunicado por el artero golpe: “La Patria resistirá a pie firme y serenamente cualquier ataque, segura de su victoria”.