Cabildo Quisicuaba, un abrazo para tod@s

Para muchos es difícil abrazar las diversas vulnerabilidades que la sociedad cubana actual presenta, mas el Proyecto Sociocultural Comunitario Quisicuaba, que dirige el Dr. Enrique Alemán, lo logra con el amor de muchos brazos y pensamientos.

Humanismo, solidaridad y entrega son las premisas por dónde camina el Cabildo Quisicuaba, que surgió en Los Sitios, en el municipio de Centro Habana y ya se desarrolla por toda la geografía nacional.

Por la transformación de los cubanos trabaja su programa que busca robustecer la participación de todos los que intervienen en la comunidad, y hacerlo de manera responsable, desde los valores y la identidad, teniendo en cuenta ese rico patrimonio cultural que posee.

La atención a personas con necesidades específicas, la comunicación junto a nuevas alianzas, desde una creatividad infinita, de nuevas iniciativas dirigidas a todos los sectores, distinguen también la inmensa labor desarrollada por el Proyecto Sociocultural Comunitario Quisicuaba, que ha tenido el reconocimiento del país, con el Premio Nacional de Cultura Comunitaria, en la categoría de proyecto comunitario, entregado recientemente a Enrique Alemán Gutiérrez, doctor en Medicina y Antropología Social, académico y religioso.

De su sostenido trabajo y a propósito del premio conversamos en exclusiva para Radio Enciclopedia con el también diputado a la Asamblea Nacional del Poder Popular y presidente de la Asociación de Espiritistas de La Habana.

¿Qué importancia le concede a dicho Premio y qué significa para usted tal reconocimiento?

La importancia fundamental que se le concede al premio es el reconocimiento al equipo, los años de trabajo con personas maravillosas, personas que han sabido de la entrega, del compromiso, del qué hacer con todos y por el bien de todos, de ese gran y hermoso precepto martiano, es hacer por la patria y es consolidar la unidad de la patria, que conformamos que rehacemos y que mejoramos a cada segundo, pensando en el otro, acompañando las familias cubanas, en sus diferentes vulnerabilidades. Es un reconocimiento extraordinario. Para nosotros tiene una altísima importancia, el equipo muy está estimulado, muy regocijado en ello. Yo simplemente me contento con saber que lo recibo en nombre de todas y todos.

¿Por qué Quisicuaba? ¿Qué le motivó realizar un proyecto comunitario?

El proyecto comunitario que hoy disfrutamos es expresión de la práctica y del bien, del amor al prójimo de la institución religiosa Quisicuaba. Yo creo que en los inicios nadie se propuso hacer un proyecto comunitario como el gran programa de reinserción social Cabildo Quisicuaba que tenemos hoy. Siempre fue la práctica del bien del amor al prójimo, la proyección hacia los demás, desde una perspectiva no prosélita, no lucrativa, de reinserción social, contextualizada en cada momento, ubicada en el contexto y con sentido de momento histórico. La madurez en el quehacer en pos de la unidad y del tratamiento a las vulnerabilidades ha sido el resultado de un compromiso con el pueblo de Cuba.

Sabemos que el proyecto ya no es solamente de la barriada de Los Sitios, en La Habana, sino que se ha extendido también a otras regiones del país.

Sí, hoy es un proyecto nacional. Cabildo Quisicuaba es un programa de reinserción social que tiene 30 obras sociales o proyectos comunitarios extendidos en todo el país. Con una participación ciudadana responsable en materia de inclusión social, como el trabajo con madres solteras, jóvenes transgresores de la ley, habitantes de calles, tercera edad, comunidad de hombres y mujeres viviendo con VIH. Es un programa que se matiza y se enriquece con la diversidad de las comunidades en Cuba. En el país no podemos hablar de una comunidad, sino de diferentes comunidades.

¿Quién es Enrique Alemán?

Yo soy el director del grupo gestor del Proyecto Quisicuaba, y para Enrique Alemán es una actitud ante la vida, es una filosofía ante la vida. Es mi vida, mi forma de ser, mi forma de actuar. No sabría vivir ya sin poder poner en práctica lo que he aprendido en la obra de la Revolución. Me considero un fruto de la Revolución. Lo que he aprendido en ella y por ella lo vuelco con muchísimo cariño cada día en el gran programa de reinserción social Cabildo Quisicuaba.