Jardín Botánico de Cienfuegos, maravilla floral en el centro de Cuba

Jardín Botánico de Cienfuegos, maravilla floral en el centro de Cuba
Foto: Prensa Latina

El Jardín Botánico de Cienfuegos, es una destacada institución científica, fundada hace más de 120 años, que aun provoca admiración entre visitantes y científicos.

La antigua Institución Atkins, situada en esta ciudad, se convirtió en un centro de investigación de plantas tropicales en el año 1900 y combinaba estudios sobre la caña de azúcar con la de otros cultivos y además, poseía y posee un jardín tropical con miles de especies.

En una reunión en 1899 entre Edwin Atkins, un productor de caña de azúcar de los Estados Unidos en Cuba, y los profesores de la universidad de Harvard, Oakes Ames y George Goodale, se estableció la «Harvard Botanic Station for Tropical Research and Sugar Cane Investigation».

Atkins contrató a Robert M. Grey, un notable horticultor empleado por el profesor Ames. Grey centró su trabajo en la hibridación de la caña de azúcar, así como la organización de la plantación de árboles y plantas importadas de zonas tropicales de todo el mundo.

En 1920, los vínculos entre el Jardín y la universidad de Harvard se hicieron más formales con una gran donación hecha por Atkins y un reconocimiento del emporio botánico como parte de la Universidad. En 1924, el «Harvard Biological Laboratory» fue construido allí.

En 1932 la administración del Jardín fue trasladada a la «Arnold Arboretum» (una dependencia de la Universidad) y fue nombrado oficialmente la «Atkins Institution of the Arnold Arboretum».

Durante la década de 1930, llegó a su apogeo de belleza y diversidad como un Jardín Botánico de árboles tropicales. Fue utilizado por profesores, estudiantes y becarios para estudiar botánica tropical, atendido por trabajadores locales que se encargaban del cuidado y mantenimiento de las plantaciones.

En 1946, terminó la administración del Jardín por el «Arnold Arboretum» y fue designado el primer director residente el doctor Arthur G. Kevorkian y renombrado como el «Atkins Garden and Research Laboratory».

Como centro de investigación agrícola tropical desarrolló variedades más productivas de granos y frutas, mientras se convertía en una atracción turística popular.

Con la Revolución cubana en 1959 y la consiguiente tensión entre los gobiernos de Cuba y los Estados Unidos, las condiciones se hicieron difíciles para los viajes y mantenimiento del lugar, y en 1962 el bloqueo estadounidense limitó mucho la participación de la nación norteña.El director por aquel entonces, el doctor Duncan Clement salió de Cuba en 1961 y Harvard puso fin a su apoyo.

El jardín es ahora conocido como el Jardín Botánico de Cienfuegos. Actualmente es una dependencia del Ministerio de Ciencias, Tecnología y Medio Ambiente. Es dirigido por el gobierno cubano. Fue declarado Monumento Nacional el 20 de octubre de 1989 y es un popular destino turístico.

En las 97 hectáreas de las que consta (siete son de bosque natural preservado), se albergan más de 2,000 especies de plantas que representan 670 géneros, de 125 familias, en su mayoría arbóreas; aproximadamente el 70% de los ejemplares son de especies foráneas.

Son de destacar la colección de palmas con 280 especies, una de las más importantes de América y del mundo. Con especies tan raras como “el árbol que camina”, “pata de elefante”, “trampa de mono”, y el de “la salchicha”, nombres coloquiales que son bien elocuentes de las formas que presentan.

Cuenta además con una colección de orquídeas con más de 400 especies, más de 23 especies de bambúes y 65 especies de jagüeyes (Ficus).

Al Jardín, a unos 15 kilómetros de la capital provincial cienfueguera, se accede por la carretera que conduce a Trinidad, una de las primeras villas fundadas en Cuba por los colonizadores españoles.

Su entrada se realiza por la bautizada por el pueblo como Avenida de las Palmas, a través de una extensa fila de palmas reales cubanas, símbolo de la nación cubana.

La institución dispone de instalaciones para la realización de investigaciones muy útiles en el quehacer científico.

El Jardín Botánico de Cienfuegos es orgullo de todos los cubanos. Durante años ha conservado sus riquezas naturales y el manejo de las colecciones de plantas vivas, encaminadas a la reproducción de especies amenazadas. En el año 2005 le fue otorgado el Premio Nacional de Conservación.

Fuente : Prensa Latina

Redacción Radio Enciclopedia