Como aquella gloriosa noche del primero de enero de 1959, y tras la orden del Comandante en Jefe, que nuevamente resonó en el parque Céspedes de Santiago de Cuba, Raúl Castro le habló a Cuba
Como aquella gloriosa noche del primero de enero de 1959, y tras la orden del Comandante en Jefe, que nuevamente resonó en el parque Céspedes de Santiago de Cuba, Raúl Castro le habló a Cuba