Un llamado en el Día Mundial de la Descontaminación Acústica

Un llamado en el Día Mundial de la Descontaminación Acústica

Cada día, en ese período determinado de 24 horas, las personas están expuestas a una amplia gama de sonidos excesivos y molestos causados por distintas actividades. Y no solo en las industrias, sino también en el hogar, la escuela, la calle con el tráfico vehicular, los lugares de recreación, aviones, sirenas barcos…

El Día Mundial de la Descontaminación Acústica o contra el Ruido, que celebramos el 12 de junio, nos llama a combatir las causas y contrarrestar ese contaminante invisible, que produce efectos nocivos fisiológicos y psicológicos a las personas, pero también afecta a los animales y las plantas.

Se define como ruido todo sonido no deseado. Desde ese punto de vista, la más excelente música puede ser calificada como ruido por aquella persona que en cierto momento no desee oírla. En el ámbito de la comunicación sonora, se define como todo sonido no deseado que interfiere en la comunicación entre las personas o en sus actividades.

Si bien el ruido no se acumula, traslada o mantiene en el tiempo como las otras contaminaciones, también puede causar grandes daños en la calidad de vida si no se controla adecuadamente.

Un primer paso consiste en difundir información sobre este tema y su relación con la salud del ser  humano, pues solo así es posible comprender que alcanzar la sostenibilidad acústica debe ser una responsabilidad compartida por todos.

Esos comportamientos de riesgo que pueden dañar la capacidad auditiva de forma permanente. La audición responsable y segura depende de la intensidad o volumen que se acostumbra, la duración en tiempo de escucha y la frecuencia o asiduidad a la exposición, tres factores relacionados entre sí y que contribuyen a la energía sonora total a la que un individuo está expuesto.


En Cuba, la Estrategia Ambiental Nacional es la directriz de la política ambiental y establece los principios en que se sustenta el trabajo en este sentido y las bases para lograr un desarrollo económico y social sostenible, además de identificar los principales problemas ambientales y las principales líneas de acción para su solución o mitigación.

Entre los principales planes y programas con que cuenta Cuba están los Programas y Estrategias ambientales de los diferentes sectores de la economía, así como el Plan Nacional para la Introducción de la Producción más limpia de la Gestión Ambiental Empresarial.

Sus objetivos específicos buscan prevenir, reducir y controlar la contaminación originada por las emisiones a la atmósfera, así como la contaminación sonora originada por los malos manejos.

En tal sentido,  se trabaja por implementar las medias correspondientes para disminuir a los niveles adecuados y eliminar en los casos que corresponda, la contaminación por ruido y otras vibraciones, además de lograr una mejor calidad de vida con mejores protecciones sonoras de los espacios arquitectónicos y urbanos.

Todo parte de la identificación de los problemas asociados a ruidos y otras vibraciones, así como de la utilización adecuada de las protecciones sonoras en todos los diseños arquitectónicos y urbanos.

Un buen ejemplo de protección sonora lo encontramos en el Código de Vialidad y Tránsito, que prohíbe a los conductores el uso sin justificación de cláxones, sirenas, silbatos o equipos de audio a un volumen que moleste o impida su buena actuación como chofer.

Ana Rosa Perdomo Sangermés