Cierra el clásico Solaris la II Muestra de Cine Ruso en Cuba

Cierra el clásico Solaris la II Muestra de Cine Ruso en Cuba
Filme Solaris Foto: MUBI

La II Muestra de Cine Ruso en Cuba concluye este domingo con Solaris (1972), de Andréi Tarkovski, considerada una de las mejores películas de ciencia ficción en la historia del séptimo arte.

Basada en la novela homónima del escritor polaco Stanisław Lem, el filme se exhibirá esta noche en el cine Charles Chaplin de la capital cubana, donde también se presentaron otros títulos imperdibles como La Moscú clandestina, que inauguró la selección.

Se trata de un drama psicológico meditativo que ocurre principalmente a bordo de una estación espacial que orbita el planeta ficticio Solaris. La misión se estancó porque la tripulación de tres científicos ha caído en crisis emocionales separadas, reseña la sinopsis. El psicólogo Kris Kelvin viaja a la estación espacial Solaris para evaluar la situación, pero allí se encuentra con misteriosos fenómenos, añade.

La cinta le valió a uno de los directores soviéticos más famosos y aclamados por la crítica el Gran Premio del Jurado, el lauro FIPRESCI y una nominación a la Palma de Oro en el Festival de Cannes de 1972.

Foto: Cinemateca Uruguaya

Obras clásicas y contemporáneas reverenciaron con la muestra los cien años del estudio cinematográfico Mosfilm, fundado el 30 de enero de 1924 en la capital del gigante euroasiático.

Entre ellas Camino a Berlín (2015), dirigida por Serguéi Popov, y se exhibirá esta tarde, en el capitalino cine Yara. La película trata en el cruce de los ríos Oder y Neisse y los esfuerzos por dispersar al ejército alemán que se ubicaba a 60 kilómetros de Berlín.

Serguéi Ogárkov, un oficial de comunicaciones, recibe instrucciones importantes para llevar las órdenes a la 341a. división, pero en un enfrentamiento con tanques alemanes no logra entregar las órdenes, como resultado la división es rodeada y eliminada.

Camino a Berlín está basada en la historia de Emmanuil Kazakévich «Dos en la estepa» y los diarios militares de Konstantín Símonov. Los personajes principales son los jóvenes Ogárkov y Dzurabáev, de diferentes repúblicas soviéticas y con distintos caracteres y estilos de vida, pero unidos en un noble propósito.

Con material de Prensa Latina

Daynelis Rodríguez Peña