Revista Bohemia: Promotora de Cultura
Generaciones en Cuba y otros países disfrutan desde 1908 la publicación de Bohemia. Esta emblemática revista festeja el aniversario 116 del hecho trascendente con la exposición Bohemia: promotora de Cultura, que acoge en La Habana, la Galería Espacio Abierto de Revolución y Cultura.
En el segmento pensaremos juntos sobre el itinerario iconográfico de la histórica revista.
Vivimos en un mundo hipervisual. La concreción de las imágenes se convirtió en un elemento necesario en el ámbito de las prácticas sociales. El acercamiento a parte de la memoria visual de Bohemia propicia ver en la muestra fotográfica cómo la socialización de acontecimientos culturales, figuras destacadas, eventos, festivales, encuentros entre personalidades y otras actividades constituye el registro de lo ocurrido, de lo visto por los públicos de diferentes generaciones.
Leer Bohemia es una práctica que disfrutan las familias. Sus páginas constituyen fuentes de conocimiento, saberes, vivencias y aprendizajes. Precisamente, esta exposición evidencia la riqueza de fotos, portadas, ilustraciones y otras manifestaciones ilustradoras de una visualidad diversa, creativa, sugerente de ideas, pensamientos y proyectos.
Es preciso ver más que mirar momentos irrepetibles, retratos, actos significativos, figuras devenidas legendarias en la cultura y el arte cubano.
El discurso narrativo construido para la exposición Bohemia: promotora de Cultura, en la Galería Espacio Abierto de Revolución y Cultura, lo realizó Abenamar Bauta, encargado de la curaduría y la museografía y el montaje lo asumió Joel Valdivia.
La muestra ilustra el compromiso de la publicación con instancias abarcadoras de la cultura en el más amplio sentido del concepto. Incluye resonancias de la vida cotidiana, las tradiciones literarias, artísticas, patrimoniales, los mitos, así como múltiples resultados de investigaciones sobre el ser y el acontecer en el mayor archipiélago de las Antillas.
Bohemia, en su aniversario 116, sigue acompañando la obra iniciada por quien fuera uno de sus más destacados colaboradores, el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, y hace también suyos los momentos de alegrías y conmemoración.
Además, apela a cumplir el deber de reflexionar sobre los acontecimientos más importantes que recogen la historia del país y de su pueblo.
La exposición invita a un emotivo viaje, pues implica la participación de espectadores ávidos por recordarnos y pensarnos mediante la visualidad en tanto sólido puente de relaciones entre los hijos de esta nación libre y solidaria.
