Este año 2023 que casi culmina nos hace recordar la historia de la poesía cubana con casi doscientos años de existencia y que, entre las fechas notables de la cultura cubana y en la forja de la conciencia nacional, se destaca la figura de José María Heredia, poeta que nació en Santiago de Cuba el 31 de diciembre de 1803, hace ahora 220 años.
Autor: Ana Rosa Perdomo Sangermés
Hace 65 años, el 28 de diciembre de 1958, fuerzas rebeldes del Movimiento 26 de Julio y del Directorio Revolucionario, al mando del comandante Ernesto Che Guevara, iniciaron la batalla de Santa Clara, culminación de la ofensiva revolucionaria en Las Villas y uno de los golpes decisivos para el derrumbe final de la tiranía de Fulgencio Batista.
Cuando el 28 de diciembre de 1988, abrió sus puertas el Complejo Monumental Ernesto Che Guevara, el pueblo cubano y muchos amigos del mundo tendrían ante sus ojos y en sus corazones una hermosa entrega de información y recuerdos sobre el Guerrillero Heroico desde su plaza, tribuna, museo y el propio monumento a su figura.
Aquel 22 de diciembre de 1961, Fidel Castro dio la noticia al mundo de la culminación exitosa de la Campaña y Cuba fue proclamada Territorio Libre de Analfabetismo, fecha devenida desde entonces en Cuba, con toda justicia, como Día del Educador.
Ese día constituye para los cubanos, el recuerdo de un legítimo júbilo y el símbolo de cómo con la fuerza del pueblo se derrumbaron para siempre cuatro siglos y medio de ignorancia.
A propósito del Día del Trabajador de la Cultura, celebración que abarca todo el país cada 14 de diciembre, no debe faltar el reconocimiento a los que muchas veces desde el anonimato laboran en el sector y garantizan la calidad de cada entrega artística y literaria.
Cualquier ciudadano cubano puede llegar a la Casa de Cultura de su comunidad, donde quizá las condiciones materiales no sean las mejores y falten instrumentos y accesorios para una mejor formación; sin embargo encuentra allí el abrazo de promotores e instructores, para los múltiples talleres de apreciación y creación.
Apenas 48 horas después del histórico repique de La Demajagua, ya Antonio Maceo había montado a caballo para sumarse a las filas de la Revolución y libraba el 12 de octubre de 1868, como simple soldado, su bautismo de fuego en Ti-Arriba.

