Ramiro Guerra, con Decálogo del apocalipsis, quebrantó todas las reglas establecidas para las funciones escénicas. Quizá la más evidente sea la del espacio.
Categoría: Con criterio propio
Con un título peculiar, La Majomía, cautivó a los públicos el programa transmitido por Cubavisión, el martes, a las ocho y cuarenta y cinco.
La primera obra postmoderna de danza-teatro cubana fue Decálogo del apocalipsis, del Maestro Ramiro Guerra.
En junio de 1959 estaban paralizados los trabajos que terminarían la construcción del Teatro Nacional de Cuba, no obstante, designan como directora a la joven filósofa Isabel Monal.
La biografía de la popular actriz mexicana, conocida por varias generaciones de cubanos y cubanas, en filmes emblemáticos del pasado siglo veinte, coloca en la mira las complejidades de una mujer que desafió estrictas normas en una sociedad patriarcal, incluso en su propia familia, y luchó por ser ella misma.
¿Cómo orientar a mis hijos al momento de seleccionar materiales audiovisuales edificantes y entretenidos?
El teatro es siempre un reflejo de la sociedad, de la vida, por eso la problemática racial en Cuba, no le es ajena.
El majestuoso imperio de la moda lidera en un relato que responde a la estética del formato líder en el universo mediático contemporáneo: la serie.

