La idea de celebrar en Cuba el Día de los Niños el tercer domingo del mes de julio partió de la consulta realizada por el Comandante en Jefe Fidel Castro a un grupo de infantes en el Campamento de Pioneros del Parque Lenin, el 6 de julio de 1974.
Autor: Ana Rosa Perdomo Sangermés
El Batallón 18 del ejército batistiano, dirigido por el comandante José Quevedo Pérez, penetró hasta la zona de El Jigüe, próxima a la Comandancia General de La Plata, donde también radicaban la fábrica de minas, el hospital y la estación Radio Rebelde.
Poco tiempo después del triunfar la Revolución cubana, su máximo líder Fidel Castro Ruz accedió a posar para el pintor ecuatoriano Oswaldo Guayasamín, a partir de este hecho surgió entre ellos una verdadera amistad y simpatía mutua que duró toda la vida.
Novedosas y creativas, las entregas de la Casa Editora Abril gozan de la aceptación de ese público especial, cargado de sueños y esperanzas, que conforman los niños, adolescentes y jóvenes cubanos
El líder de la Revolución hizo mucho énfasis en el papel de la cultura como vía para la emancipación humana y esencia de un proceso cultural renovador.
Aquellos tres jóvenes que conmocionaron a la ciudad de Santiago de Cuba el 30 de junio de 1957 eran todo valor y coraje, muy decididos en el cumplimiento de sus misiones, por muy arriesgadas que fueran.
Este 17 de junio hubiera cumplido sus 80 años de vida y en toda Cuba, incluso más allá de sus fronteras, se le recuerda.
Nacidos el 14 de junio, más allá de la coincidencia de la fecha y distantes en el tiempo (83 años), a ambos los identifica la comunidad de principios revolucionarios, el modo abnegado y ejemplar con que supieron asumir -y ejercieron- el “difícil oficio de hombre” de que hablara José Martí.