Julio Antonio Mella (1903-1929) califica entre esos jóvenes que trazan, a manera de brújula, el rumbo de su tiempo presente y anuncian el tiempo por venir.
Autor: Ana Rosa Perdomo Sangermés
Allí, en la calle Obrapía, número 111, en La Habana Vieja, se describe la vida y obra del destacado pintor, un tesoro que guarda con celo la antigua casona del siglo XVIII, restaurada por él y la Oficina del Historiador de Ciudad.
Desde Santiago de Cuba partiría el 2 de enero de 1958 la Caravana de la Libertad, con Fidel Castro al frente, hasta La Habana. El júbilo era desbordante en el pueblo, volcado en las calles y carreteras, que aclamaba con grandes muestras de cariño y admiración a los combatientes del Ejército Rebelde triunfante que la integraban.
Bien merece Pedro Izquierdo Padrón, conocido en Cuba y el mundo como “Pello, El Afrokán”, que se le recuerde en ocasión de conmemorarse el aniversario 90 de su natalicio, como uno de los grandes percusionistas que ha tenido Cuba en todos los tiempos.
Para todos sus combatientes, ejemplos de lealtad absoluta al pueblo, al Partido y a la Revolución, un saludo de admiración y respeto
Faltaba poco más de un mes para que Conrado Benítez García cumpliera 19 años de edad y ya se convertía en el primer mártir de la Campaña de Alfabetización el 5 de enero de 1961.
El Vaquerito le había confesado a sus compañeros de armas en algunas ocasiones que su ilusión era entrar triunfante encima de un tanque de guerra en el campamento militar de Columbia, en La Habana, y estudiar la carrera de Derecho como había hecho Fidel.
En Casa de las Américas, institución cultural fundada por ella en 1959, mantuvo su fervoroso deseo por seguir tejiendo desde la cultura la integración de los pueblos de Nuestra América.